¿Casa muy grande?, ¿hipoteca muy alta?, ¿nido vacío?

Si tu casa es muy grande, y/o si aún estás pagando parte de la hipoteca. Seguro que puedes encontrar  una vivienda más pequeña y disfrutar del dinero de la diferencia entre la grande que vendes, y la pequeña que compres. Quizás puedas reducir los gastos financieros, y vivir en una casa con un tamaño más adaptado a tus necesidades ahorrando en climatización, limpieza, etc… o en esa localidad o zona en la que siempre pensaste vivir cuando te jubilases y todo ello «sin pasar por caja», ya que te puedes beneficiar de importantes ventajas fiscales.

Te explicamos cómo:

Si te ves reflejado en alguna de estas situaciones o en varias de estas circunstancias, y eres mayor de 65 años, puedes cambiarte de casa y aprovechar las ventajas fiscales para mayores de 65 años.

La venta de una vivienda tributa en el IRPF si se ha obtenido alguna ganancia con la operación. Si la casa que se ha vendido es la habitual, la mayoría de los contribuyentes pueden quedar exentos de este impuesto, pero únicamente si han reinvertido todo el dinero de la venta en la compra de una nueva residencia principal. Aquí es donde llega la ventaja para los mayores de 65 años que podrán disfrutar de estos beneficios fiscales si venden su residencia habitual independientemente de que destinen todo, parte o nada del dinero obtenido a la compra de su nueva vivienda habitual.

Es importante destacar que para que se considere vivienda habitual y puedas aplicar esta bonificación debe haber sido tu domicilio habitual durante los últimos 3 años.