¿Es 2020 un buen año para comprar una vivienda?
¿Los motivos?
El crecimiento de los precios se ha ralentizado por primera vez en los últimos años.
El mercado se encuentra en un momento de estabilidad y crecimiento moderado y se estima que los precios cuenten con un crecimiento sostenido de entre un 2 % y un 4 %.
Según los datos de TINSA del cuarto trimestre de 2019, el precio medio de la vivienda nueva y usada creció un 2,6% en tasa interanual. Esto significa el ritmo de crecimiento de los precios más lento de los últimos tres años. Según la sociedad de tasación: «Las ciudades de Madrid y Barcelona han experimentado una desaceleración del crecimiento. En Madrid, la vivienda se encareció de media un 5,3% el año pasado, frente al 16,5% de 2018. En Barcelona, el incremento medio en 2019 fue solo de un 1,6% frente al 7,7% del año anterior».
La oferta actual hipotecaria.
La oferta actual ofrece préstamos con tipos de interés bastante atractivos, los cuales expertos prevén que sigan manteniéndose así, si tenemos en cuenta que la firma de préstamos también se ha ralentizado desde que llegó la nueva Ley Hipotecaria.
¿Cuándo es mejor comprar?
Teniendo en cuenta que el Euribor sigue en negativo, el Banco Central Europeo ha retrasado la subida de tipos y los precios, aunque moderadamente seguirán subiendo, en los primeros meses del año puede ser buen momento para comprar una vivienda.
Aun así, es difícil definir un mejor momento para comprar una vivienda, hay que tener en cuenta diversos aspectos, como la situación geográfica, también se debe estudiar el mercado actual, comparar la oferta y contar con el presupuesto adecuado. Realmente el mejor momento realmente depende del cliente y del tipo de vivienda a comprar y para qué fin, si es para inversión o para uso habitual.
¿Dónde habrá mejores oportunidades para el comprador? ¿en la obra nueva o en las viviendas de segunda mano?
Primero debemos tener claro que obra nueva y segunda mano son dos productos distintos, para clientes distintos. El que pueda esperar 18/24 meses podrá optar por vivienda nueva, y el que requiera inmediatez, optará por segunda mano. Pero, en cualquier caso, como todo producto, éste se comporta de acuerdo a las leyes del mercado. En zonas de poca demanda pueden aparecer algunas oportunidades en primera y segunda mano, y en zonas de mayor demanda los precios serán mayores. Pero como norma general, la vivienda de segunda mano suele tener una mayor capacidad de ajuste de precio que la vivienda de obra nueva.